Una abejita se ocupará de transformarla.
La molestará un poco. La invadirá…
Ella llegará a ser mucho más. Será convertida en miel.Tal vez también se convierta en tejido muscular y en huesos, al ser untada en el pan de tu desayuno. Y ya no será una simple foto.
Será parte tuya.
¿Comprendes?... Eso que nos molesta puede llegar a hacernos mejor o renovarnos completamente. Las oportunidades a veces se disfrazan de abejas...
"Gracias por ser parte de mi vida. Por este año compartido."
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